Discos
por Xavier Valiño
JENNY LEWIS: On the Line (Warner)
Al igual que hizo en su anterior disco (The Voyager, 2014), Jenny Lewis vuelve a trabajar en su cuarto álbum con Ryan Adams. Incluso su portada reproduce la misma parte de la anatomía de la cantante. También están Beck, Ringo Starr, Don Was, Benmont Tench o Jim Keltner, repitiendo algunos, pero a diferencia del anterior aquí también interviene otro productor, Shawn Everett.
Si aquel era un disco más electrónico y cercano al rock adulto, aquí Lewis parece más inspirada tras separarse del músico Jonathan Rice tras doce años de convivencia y la muerte de su madre, con quien se reconcilió cuando moría de cáncer tras media vida separadas. Espoleada por su convivencia con Annie Clark (St. Vincent) y su proyecto más funk Nice as Fuck, Lewis habla de ruptura, muerte, redescubrimiento, renacimiento y empoderamiento con un ramillete de sus mejores melodías.
LA CASA AZUL: La gran esfera (Elefant)
Por fin, después de ocho años, se edita el nuevo disco de La Casa Azul. Aunque Guille Milkyway ha hecho mil cosas mientras (reconstruir temas de Nino Bravo o Camilo Sesto, trabajar con Fangoria, componer para series, programas y películas, ser jurado y profesor de dos programas de talentos…), lo cierto es que no acababa de estar satisfecho con sus nuevas canciones y aquí hay temas de varios años, como algunos que fue dando a conocer aunque otros quedaron en el camino.
El conjunto se nutre de diez canciones trabajadas durante este tiempo, resultando un conjunto más pop, de sonido más de banda, y un poco menos electrónico, con acercamientos a la música urbana, ecos de ELO, Beck, Frank Ocean, The Go! Team, Phil Spector y tantos otros, en un disco más autobiográfico en el que aborda sobre todo relaciones sentimentales en crisis y el inevitable paso del tiempo.
NICK WATERHOUSE: Nick Waterhouse (Leisure-Popstock!)
Entre los blancos que mejor reinterpretan el rhythm & blues añejo (junto a Eli ‘Paperboy’ Reed y Mayer Hawthorne), está Nick Waterhouse. Tras tres discos aclamados, el californiano publica ahora un cuarto de título homónimo. Ponerle su nombre se debe a que recoge como nunca sus filias culturales y emocionales (la música de Irma Thomas y Chico Hamilton o las películas de Robert Siodmak y Adam Curtis) y por contar historias más personales que antes.
Más rasposo que nunca, en sintonía también con el más reciente James Hunter, Waterhouse presenta una colección de cortes urgentes, pegadizos y crudos, en los que habla de fantasmas, dinámicas de poder, noticias e identidades falsas, la ausencia de ideología y la política podrida, que se desata en “Man Leaves Town”, se muestra atemporal en “Thought and Act” y se luce en “Wreck the Rod”.
PAUL WELLER: Other Aspects, Live at the Royal Festival Hall (Parlophone-Warner)
El año pasado, Paul Weller dio dos conciertos junto a su banda y una orquesta (London Metropolitan Orchestra) básicamente femenina con su directora, incluyendo una sección de vientos. Ahora se edita en formato de doble compacto más DVD, con Weller recreando 25 de sus canciones, 11 de ellas de su último álbum True Meanings, que ya era un disco casi totalmente acústico.
Ya en 2001 había grabado Days of Speed, lo más parecido a este disco, aunque sin el respaldo orquestal. Aquí se hace extraño oír en ese formato más sinfónico cortes de The Jam como “Private Hell”, “Boy About Town” o “Tales from the Riverbank”, aunque las elegidas de The Style Council (“Have You Ever Had It Blue” y “A Man of Great Promise”) y algunas de sus discos en solitario sí relucen con este formato (“Aspects”, “Books”, “Strange Museum”, “Wild Wood”…).
LAS ODIO: Autoficción (Las Odio-Desvelo)
Después de antecedentes como Dúo Divergente, Agnes o Las Cruces, las cuatro componentes de Las Odio decidieron montar un grupo inspiradas por el Trio Grill con el que poner en práctica su colaboración con el colectivo feminista ya extinto Sisterhood. Su debut, Futuras esposas (2017), destilaba una cínica ironía de guerrilla, al que ahora sigue un disco menos pop, más directo y oscuro.
Con ecos del garage de The Oh Sees o Ty Segall, del post-punk de Manchester y de bandas como ESG y The Slits, su sonido se muestra más contundente instrumentalmente. Por su parte, sus textos airean el mercado neoliberal (“Meritocracia”), el capitalismo (“Impresora 3D”), el patriarcado (“¡Las Odio!”), la ambición (“Lo quiero todo”), la precariedad (“Ya que preguntas”) o las críticas al empoderamiento femenino (“Fieras”), retratando la vida urbana de trabajo precario.
DURAND JONES: American Love Call (Dead Oceans-Popstock!)
Hace poco más de un año, esta banda nacida en la Universidad de Indiana se daba a conocer con un debut homónimo repleto de soul clásico y energía funk, todo un arrebato de nostalgia concentrada que aun así sonaba fresco. Ahora regresan con un álbum más sombrío, para escuchar y reflexionar más que bailar. Su single, “Morning in America”, es el mejor ejemplo, pasando en pocos minutos de hablar de un país que se despierta con ganas al ‘duelo’ por el país.
Tras tocar la burocracia, las desigualdades o la segregación racial y económica por igual, “Sea Gets Hotter”, entre otras, recuerda el cambio climático y lo efímero de la existencia. Pero no han perdido del todo sus canciones de amor, esperanza o, simplemente, diversión. Ahí están, para recordarlo, “You Know”, con la voz en falsete del baterista Aaron Frazer, “Circles”, “Listen to Your Heart” o “True Love”.