“Cine para leer: Julio-Diciembre 2005”

Título: “Cine para leer”.
Editorial: Mensajero.
Autor: Equipo Reseña.
Páginas: 331
Portada: Álvaro Sánchez.
www.cineparaleer.com

Por Alberto López Echevarrieta

Desde que en 1972 el Equipo Reseña puso en marcha el proyecto tan original como práctico de recoger en un libro todos los aconteceres del año cinematográfico, “Cine para leer” se ha convertido no sólo en un clásico, sino en un referente al que, con el paso del tiempo, le han salido muchas imitaciones.

“Cine para leer” contiene las películas estrenadas o repuestas a lo largo del año ordenadas por los meses de estreno con sus fichas técnicas y artísticas así como comentarios críticos a cargo de un grupo de especialistas de acreditada solvencia. El libro se complementa con una relación de acontecimientos ocurridos –fallecimientos de gentes del cine, premios, festivales…-, palmarés de los distintos certámenes e incorporando últimamente un análisis o punto de vista de los hechos más significativos de cada mes. Además, una completa bibliografía informa al lector de las publicaciones aparecidas durante el período comprendido.

“Cine para leer” es esencial como texto de consulta y tiene la gran ventaja de su cómodo sistema de localización de datos, ya que tiene índices de las películas por título en español y por directores. Incluye asimismo la relación de festivales internacionales y de temas tratados en la sección “Punto de vista”. La presentación del libro es muy atractiva con un diseño moderno, una impresión muy buena a todo color y abundante material fotográfico.

Desde hace unos años, “Cine para leer” divide el año natural en dos tomos para hacer más fácil su manejo. Ahora acaba de salir al mercado el correspondiente al último semestre de 2005 que complementa el ya aparecido el pasado verano.

Ciertamente –y a la bibliografía me remito-, hay muchas publicaciones anuales sobre cine, pero no menos cierto es que ésta resulta imprescindible para los aficionados y profesionales. Al margen de la calidad de su contenido, y fuera de toda duda, se une el orden de exposición de los temas y su presentación que, desde un punto de vista práctico, hace olvidar la incomodidad de aquellas antiguas fichas sueltas que tanto volumen ocupaban.

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