LAETITIA VELMA: Les eaux profondes (Les Disques d’Avril-Green Ufos)

Que no despisten los antecedentes que se señalan en relación a esta nueva cantante francesa: Bat for Lashes, El Perro del Mar, Electrelane o Arcade Fire. Claramente, debe relacionarse con Dominique A, algo más que su mentor y con quien comparte mucho, en especial ese gusto por una chanson francesa evocadora y elegante, tensa y poética, tan vanguardista como clásica en su concepción, que por encima deja brillar a su hermosa voz. 

SMOKE FAIRIES: Through Low Light and Trees (XL-Music As Usual) 

Sabíamos de su existencia por sus colaboraciones con Richard Hawley o Jack White. Con este, su primer álbum, Smoke Fairies se revelan como el dúo folk-rock de voces mejor empastadas desde que Kate y Anna McGarrigle (la madre y tía de Rufus Wainwright) grabaran sus mejores temas. O sea, sonidos que tienen su mejor definición en el título: A través de la luz baja y los árboles. Frente a grabaciones anteriores más oscuras, como “Frozen Heart” o “Living With Ghosts”, la producción ha conseguido un sonido más pulido y asequible.

JOSEPH ARTHUR: Graduation Ceremony (Megaforce-Popstock!) 

La razón por la que Joseph Arthur a estas alturas no ha sido un éxito en todo el mundo se nos escapa. El cantautor eléctrico que Peter Gabriel fichó para su sello, el compositor que Michael Stipe elogió repetidas veces, el partícipe del proyecto Fistful of Mercy junto a Ben Harper y Dhani Harrison… Su sexto álbum, sin contar sus colaboraciones con The Lonely Astronauts, no será ninguna sorpresa para quienes lo conocen. Para los demás, aquí hay un fino orfebre del pop que se luce en un disco de ruptura no del todo triste, en la línea de Ed Harcourt, por ejemplo. 

ASMARA ALL STARS: Eritrea’s Got Soul (Out Here-Resistencia)

Melismas saharianos, blues en crudo, guitarras eléctricas, cálidos saxos, contundentes tambores… Asmara All Stars nos reúne y presenta a algunos de los mejores músicos y cantantes de Eritrea, aún bajo sombra de conflicto bélico con su vecina Etiopía, mostrando la enorme diversidad sonora del país y el rico legado que allí hay. Música con un elevado poder de excitación producida y dirigida por el polifacético y plural artista francés Bruno Blum, básicamente conocido allende su país por los tres discos dub/reggae que le produjo a Serge Gainsbourg.